Hoy 24 de abril, tras el día de Sant Jordi, arranca la Feria de Abril andaluza en Barcelona, el mayor acontecimiento festivo del año en Cataluña (que patalee quien quiera).
Como estoy tan cansadísimo esta semana, dudo entre ir esta noche o la de mañana. La feria dura hasta el domingo 3 de mayo, pero yo me marcho el lunes de viaje dos semanas.
Desde esta noche, casetas adornadas de farolillos y telas blanquiverdes, trajes de gitana, pescaíto frito, actuaciones y dos millones de curiosos. Es sorprendente el empuje que la feria tiene entre la comunidad latinoamericana, que el año pasado constituía casi una cuarta parte de los visitantes.
Durante estos días se podrán comprar productos extremeños y andaluces, pasear por un mercadillo, bailar, encontrarse con los amigos y disfrutar sanamente mientras otros tontos regurgitan bilis por pensar que esta feria aplasta la cultura catalana.
Pasaos por la feria aunque sea una sola noche para al menos ver lo bien que montan las casetas, oír sevillanas, comer fritura andaluza (los precios deben estar a la vista) y sobretodo ver la maravillosa mezcla de catalanes, andaluces, latinos y extranjeros disfrutando de una feria única.
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