Y es que el Camp Nou acogerá la final de la Copa del Rey de fútbol, para la que se han clasificado el Atlético de Madrid y el Sevilla.
Nada menos que 50.000 hinchas atléticos y 32.000 sevillistas llegarán a la ciudad, y se han establecido medidas especiales para evitar altercados.
Desde el momento de la llegada en tren o avión, ambas aficiones serán separadas para evitar enfrentamientos. Por ejemplo, los vuelos procedentes de Madrid irán a una terminal del aeropuerto (T2) y los de Sevilla a otra terminal diferente (T1).
Y es que el desembarco es notable: 450 autobuses, 21 trenes y 60 aviones vendrán llenos desde ambas ciudades.
El ayuntamiento de Barcelona y los clubes han organizado dos áreas de fans para tenerlos controladitos. Los seguidores del Sevilla estarán reunidos en un parque junto al Camp Nou y los del Atlético en la zona de Montjuic.
El partido empezará a las 21'30, será retransmitido por numerosas televisiones de todo el mundo, y cuando termine los aficionados se encontrarán con grandes medidas de seguridad en todo el centro para evitar actos vandálicos como los que suelen hacer los aficionados del Barça (quema de contenedores, batalla con la policía, etc).
Tras ganar la semana pasada la Europa League (antes Copa de la UEFA), el Atlético viene ilusionado y con ganas de obtener otro trofeo, mientras que el Sevilla, que lleva 3 años sin títulos, lo ve como una cuestión de honor.
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