La catedral y la basílica de Santa María del Mar se libran por fin de los andamios (o al menos se libran sus fachadas).
Desde que llegué a Barcelona hace tres años y medio prácticamente no he visto nunca la fachada de la catedral, cubierta eternamente de andamios. Pero hace unos días, por sorpresa, vi que se los habían quitado...y descubrí asombrado su fachada como quien la ve por primera vez.
Igual ha ocurrido con Santa María del Mar, que llevaba un tiempo con la fachada cubierta a fin de pulirla del color que la polución de antaño le había dado, y de restaurar sus torres. A esta iglesia, al igual que a la catedral, todavía le queda trabajo por hacer.
En el caso de la catedral, su fachada (igual que el cimborrio) no es la original, sino que es un añadido neogótico con armazón de hormigón armado, y es precisamente esa 'calidad' de los materiales modernos la que ha provocado siempre su agrietamiento y deterioro.
Aquí la vemos con el cimborrio anterior (pequeña cúpula del centro):
Y aquí la vemos con el cimborrio neogótico, con y sin andamios:
Ahora por fin vuelve a lucir su fachada a la vista de todos, pero los andamios continúan en otras zonas de ambos templos.
Y es que esto es una historia de nunca acabar...sobretodo con la catedral...porque verla totalmente libre de andamios o redes protectoras es realmente imposible.
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